En esta parte de Caracas
Cuando avanza la tarde
Me gusta mirar la calle
Tiene suerte el que puede pasear por las avenidas de árboles
Los hebreos con sus barbas y sombreros hablando de sus negocios
Tienen suerte
Los perros que se acuestan en la acera a dormir la siesta
El boticario y los muchachos del taller mecánico que siempre están mirando la calle
Hablan y bromean con los transeúntes
¡Qué suerte tienen!
En el murito de piedra está sentado el borrachín celebrando su buena fortuna
Una vez al año por esta fecha se caen las hojas de los caobos
O alguna madrugada los ladrones rompen con cabillas los vidrios de un carro
Aún así estas calles cercanas al Ávila son bienaventuradas
Su color y su fresco
Esta altura
Caracas es sortaria
Texto publicado en El visitante de agosto (Editorial El Estilete, Caracas, 2017)
María Elena Huizi
Imágenes: Said Assef
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La belleza estuvo siempre disponible a su ojo y a su palabra…Bendita seas hermana amada….que belleza de puesta en visión de uno de sus poemas mas hermosos y “pequeños”…Caracas nuestra siempre…Gracias CONTEXTURAS…una bella celebración en un día triste….
Benditos son aquellos capaces de vislumbrar belleza entre las grietas y la podedumbre
Para mí, son seres alados , elfos de la escritura, pintura, magos de la vida
Hermosas líneas, tan hermosas como otras que he leido de ella..
Sencillamente hermosas…
Un poema simple y sencillo de la pasíón simple y sencilla de los caraqueños por nuestra Caracas… Si somos sortarios
Sin duda, querido Jorge!
Nuestra mamá decía: “ María Elena es carne viva”
Su alma, sensible a las cosas más humildes y bellas era sin duda “carne viva”.
Que delicia era sentarme a ver películas contigo hermana,a reírnos y bromear juntas. Como te extraño!
Yo también…..Beso grande!
Qué suerte la de María Helena de ver los árboles de la calle que siempre están para darnos su sombra y dejar pasar la brisa para darnos fresco en el calor de las 12
Hermoso relato hermosa y querida tía. Leerte para mi es sencillamente magia pura. Nena, a las cuatro te sigo viendo inmersa de tanta sensibilidad en tu poética prosa, amena, entretenida y llena de pasión por esta maravillosa ciudad de la furia (perdóname Cerati por copiarte sin permiso). Fuiste un ser excepcional en todos los sentidos, los ángeles arriba están en éxtasis con tu celestial compañía desde tu llegada.