Soy uno de esos que arrastra los pies por las carreteras. De los que perdió los zapatos en un talud y los calcetines en un arroyo. De los que han dejado retazos de piel en zarzales y en alambres de espino. De los que hemos tenido hambre, fiebre y diarrea en refugios improvisados, bajo la lluvia perenne o un sol reverberante, y la mirada cruel y despectiva del que debiera ser mi prójimo. De los que han visto a los niños huesudos y a los viejos enclenques quedarse tendidos en los arcenes; y a mujeres sin leche en las tetas amamantando cadáveres. De los que coleccionamos llagas de sarna, piojos y pulgas. De los que hemos vendido el cuerpo por mendrugos. De los que hemos sido expulsados de todos los paraísos. De todos los purgatorios. De todos los infiernos. Soy uno de esos. Y aún miro el horizonte como si estuviera cerca.
Imagen de portada: fotografía de Rafael Guillén, serie La Candela (2009).
Creo que algunos hemos transitado esos parajes …
( algunos hasta dos veces al dia )…
Miles y miles de esos, perdidos en la ruta o alcanzando la meta.